Estamos en las mismas no, peores. Por poco que me guste, la aritmética parlamentaria es lo que es y toca asumirlo.
a) La estrategia se basa en rascar recursos de la media España algo más trabajadora y honrada, atizando los odios de la otra media, diciéndoles que tienen derecho a todo y que encima, los decentes somos malos y les quitamos lo que les pertenece.
b) En nombre de la Libertad, están constriñendo las libertades, aunque se note poco, porque parte de esas regulaciones son relativamente lógicas, pero en cualquier sitio que se meten, se les va la zarpa estalinista, y encima, lo hacen mal, son ineptos burócratas, en su torre de marfil, que en su vida se han enfrentado a la realidad y no saben manejarla Acaparan todo, han aumentado escandalosamente el Poder en todas las escalas sociales, y con sesgo descaradamente partidista.
c) El sector feminazi y anexos (LTGBIABCDEEFGHIJKLMNOPQRSTUVXYZ, no me quiero dejar ninguno) sigue crecido, aunque la Yolanda, que además de mala es muy lista, ha vetado a la Montero, que es estúpida, pero pinta de que la sustituta será aún peor. Me parece increíble que a estas alturas, no haya explotado la injusticia y el destrozo que están provocando, como de costumbre, fomentando el odio. Y eso que a muchos ministros no tengo nada que decir, incluso les apoyo (agricultura (Garzón) defensa (Robres) economía (Calviño)...)
e) Por enésima vez, a propósito de la puta amnistía, por no decir del puto blanqueamiento de ETA (¿se me nota cabreado?) el desgraciado ese está haciendo lo que le conviene a él, no lo que le conviene al país. Miente, engaña, cambia de opinión, dice y hace única y exclusivamente lo que le interesa a él. Prácticamente la totalidad de la gente con criterio está totalmente en contra de la misma, y en vez de servir para pacificar, sirve para echar pólvora al fuego. En vez de admitir su error y rectificar, les da fuerza a todos los sectores secesionistas y odiadores de la concordia y de la convivencia, catalanes y vascos, tiro en la nuca o asalto al parlamento incluidos, racistas, supremacistas, exclusivistas...
¿Y que nosotros somos buenos y perfectos? pues ná, tranqui, que no, que nos necesitamos todos, pero el grado de exclusión al que nos somete este trilero es mucho mayor que otros precedentes.
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