COOPERACIÓN Vs COMPETENCIA

No, no voy a decir nada del año saliente ni del entrante, pero sí, como de costumbre de tiempos pasados y futuros. Procedente de Xl Semanal, del Blog del Cartero, saco esta reflexión

"Desde tiempos remotos, los clanes humanos han competido entre sí por el territorio, la caza, los pastos, el agua y las sucesivas formas de riqueza que hemos sido capaces de identificar, aprovechar y producir. Era un fenómeno espontáneo, y que en tanto que se daba entre grupos con una capaciad reducida, tanto de construir como de destruir, sólo redundaba en la extinción recurrente de un número variable de individuos o tribus.

Ahora, somos más que nunca, y nuestros medios son tan poderosos como jamás lo fueron. La competición que mantenemos, y que sigue siendo a menudo cruenta, lo amenaza todo. Lo apunta un lúcido lector: toca cooperar, o irnos todos juntos al garete."

TEJEMANEJES

Dentro del absoluto y completo berenjenal que tenemos en Siria (por si hubiese pocos problemas) es noticia la caída del principal asentamiento de la oposición al régimen, que en cuestión de semanas, y con un bombardeo masivo y sin contemplaciones (la guerra no se hace en tutú y de puntas) de quien sabemos que se ha cansado de jugar a pastorcitas.
Hoy sale en el DdN un artículo denso, de un corresponsal que acierta prácticamente siempre, desvelando los entresijos del fenómeno. Y como suele ser en esos mundos de Dios, entre unos y otros se reparten el pastel. Merece la pena leerlo, de verdad.

 Y rezar un poquito a cualquier Dios o a cualquier político (menos al coletas y compañía, claro) para que nos guarde de esos dioses y esos políticos.

JUNG

Se cumple algúna onomástica del discípulo de Freud, y a propósito de la cual publican en El Pais un artículo que me ha gustado mucho, respecto al inconsciente colectivo. Le he dado las gracias al autor por su trabajo de condensación y por el tratamiento de la información, desde el respeto que cualquier figura merece. Entresaco algunas frases: 

-El inconsciente colectivo es algo así como una patria común y desconocida, se manifiesta aquí y allá, entonces y ahora, y es razonable pensar que lo seguirá haciendo.
-El poder del arquetipo no radica únicamente en la emoción, sino en que expresa al mismo tiempo un instinto biológico y espiritual
-Para Jung la sabiduría consiste en armonizar lo consciente y lo inconsciente. Esa es la misión trascendente de la psique, el fin último del individuo: la superación del yo y la conquista del sí mismo  
-Como investigador científico, tenía prohibido hablar de Dios, y aunque fue un disidente de las religiones dogmáticas, nunca ocultó sus experiencias inmediatas con “algo que vive y permanece bajo el eterno cambio”.
-Durante años estudiará a fondo la alquimia, así como las tradiciones gnósticas y neoplatónicas. En ellas encontrará el principio femenino que no halló en el mundo patriarcal de Freud.
-Cuando se aproximaba su muerte, Jung pudo hablar con más libertad de sus visiones y, como los antiguos profetas, insistió en su belleza e intensidad. ¿Es razonable pensar que fue un charlatán? Hay indicios suficientes para responder negativamente a esta pregunta. Cuando emergía de dichas experiencias, la ciencia le parecía “un lúgubre sistema de celdas y un horrible disparate”. Tenía entonces la sensación de que la vida era sólo “un fragmento de la existencia” y lamentaba que la razón crítica hubiera hecho desaparecer el sentido de la trascendencia, dado que el individuo moderno sólo se identifica con su parte consciente
-Renunció a poner por escrito sus “revelaciones”, reconociendo simplemente que vivía en un mito que le permitía plantear dichas cuestiones. Jung tuvo claro, como el budismo, que somos el vector donde confluye el patrimonio de nuestros antepasados y que, cuando muramos, nuestros hechos nos seguirán. Que nuestra psique continúe existiendo tras la muerte no implica necesariamente que algo de nosotros se conserve eternamente. Asumió que cada ser humano es una pregunta dirigida al mundo y que él debía aportar su propia respuesta

REDISTRIBUCIÓN

La liberté es una cosa, en eso discutiremos siempre y es difícil concretar por su intangibiliad, pero en cuanto empezamos con la igualité, y sobre en su vertiente pecuniaria, la cosa se complica, porque la fórmula más votada (curiosidades de la democracia) es quitarle la pasta o recursos a los que tienen (osea, pocos) y dársela a los que no (osea, muchos). Y no digo que no, pero en este caso, el concepto justicia no es equivalente a número de votos.
Y es otro de los grandes retos futuros, la equidad, porque las masas, unas veces con cierta razón y otras muchas con poca, se enardecen y, como buenas masas, echan la culpa a los demás de sus problemas.
Y además, en su mayor parte, los que tienen pasta se la gastan en crear riqueza. De vez en cuando, en vicios, claro, pero porcentualmente poco, algo residual.
 

Y si ya tenemos problemas con la financiación autonómica, imagínate la global.