miércoles, 17 de marzo de 2010

Singing

En el módulo de Preparación Mental para los nuevos Kinitos, hablaba Eduardo sobre diversos temas, y aprovechaba para presentar su obra editorial. Acostumbrados a emociones fuertes, les prevenía yo de que esos libros eran todos como muy básicos,casi infantiles, que eran herramientas mentales muy sencillas y simplonas, y que el verdadero cambio estaba en ellos, no en los libros (que no les aconsejé comprar). Y de todas las cosas que dijo, la más importante coincido en que es eso de "cantar nuestra canción".
Es complejo explicarlo, pero en resumidas cuentas quiere decir que busquemos aquello con lo que nos sintamos felices, realizados, armonizados, e independientemente del resultado (aunque los hay masocas, claro) nos entreguemos a ello con entusiasmo. Los más listos nos convencen de cantar SU canción, no la nuestra (una habilidad que también conviene desarrollar) y tenemos que buscar hasta encontrar un acorde que nos suene bien, y que cuando le recemos a Jesusito por las noches, le agradezcamos que nos lo haya puesto delante para disfrutarlo.
Ni más, ni menos, que lo que necesitamos todos, con o sin coachers, psicólogos, aduladores pelotilleros... Los garbanzos se consiguen tragando algún sapo, eso es inevitable, por mucho que parezca, las películas de Walt Disney NO están basadas en hechos reales. Es más, casi, ni siquiera la realidad son hechos reales, y si no, que se lo pregunten a los periodistas.
Con esta trilogía filosófica, y empezando ya a aburrir, declaro reducir un poco mi carga ejemplarizante y frecuencia de palizamiento en este foro hasta nueva comunicación (me parece que no me lo creo no yo).

1 comentario:

Tordon dijo...

Bueno, por intentarlo que no quede.
Aunque los vecinos se quejen de los decibelios
Salu2