domingo, 29 de noviembre de 2020

DECÁLOGO DE LA ESTUPIDEZ

No nos creamos únicos, nuestro Yo tonto nos acompaña desde el principio de los tiempos, empezando porque nada es tonto o listo aisladamente, sin su contexto; que cada cual haga su listín y su listón:



-       1: El movimiento social de hoy en día, la mayor parte de las noticias, comentarios, pensamientos de la masa, se orientan a “repartir”, osea, quitarle al que tiene para darle al que no tiene. Por qué tiene o no tiene la gente, eso no se considera. Tener es pecado y punto.

-       2: Emprender, innovar, cambiar estructuras obsoletas (con lo que tiene también de revolucionario y a veces destructivo) además de ser muy difícil, te pones al frente de un rebaño cuyo deporte es despellejar al que se sale.

-       3: El socialismo está muy bien para eliminar las grandes diferencias sociales y las injusticias (la medida de esas proporciones de injusticia es muy discutible, cierto) pero ahora se trata de, con el criterio totalitario de los que mandan, que todos tengamos igual. La igualdad se enrasa por abajo. Pedir trabajar al vago está mal visto, la cultura del esfuerzo está “out”.

-       4: Por definición, las empresas y empresarios somos malos, y cuanto más grande más. No se tiene ningún pudor para fastidiarle o impedirle crecer. Se crea y fomenta el canibalismo entre empresas, que prestan servicios de forma razonablemente honrada (vale, no siempre). Cuando al Poder le interesa, destroza mercados, y en nuestros tiempos más y con medidas totalitarias estalinistas, te toca la purga de San Benito y punto, porque lo mando yo.

-       5: No hay diálogo social cuando me creo en poder de la verdad absoluta. No gestiono o gobierno para todos, sino sólo para los míos, a quienes además, les vendo que el problema son “los otros”. Tenía toda la razón el coletas que había una casta política, pero se callaba que lo suyo era subirse al carro, no cambiarla ni mucho menos mejorarla, como ha pasado siempre. Humano soy, nada humano me es ajeno

-       6: En el ámbito País, no puedo hablar peor. Se desprecian instituciones, se destroza el sentimiento patrio, se trocea la unidad, se venden barato para comprar droga-Poder. Se descuidan logísticas potentes en el ámbito comercial, militar, influencia cultural, sentimiento común de pertenencia a un colectivo fomentando el individualismo…

-       7, 8, 9 y 10: como he dicho decálogo, pues los mandamientos que faltan te los pintas tu, majo, que yo me voy a ver la ópera retrasmitida en cines que me lo paso chanchi piruli.

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