lunes, 25 de octubre de 2010

Cuantica cuántica

Hemos estado explorando las fronteras del conocimiento, con buen resultado: nos hemos divertido y fluído de lo lindo. El método científico, inexorable: petas el chrimanguito, y ¡funciona!. A pesar de las explicaciones, seguimos sin entender cómo, pero la contentura crece.
Y como decía ese psiquiatra: Es muy fácil distinguirlos: el terapeuta es el que cobra, el enfermo el que paga.

2 comentarios:

Tordon dijo...

Me han informado de la presencia en su reunión de un racionalista infiltrado ,un newtoniano de medio pelo, poco ondulatorio y , que -para más inri- come por dos.

¿Es cierto que usted tuvo que sacar el laud para - como a las fieras- tratar de amansarlo?

Salu2

Pele Ón dijo...

No sólo eso, tuve que pedir ayuda a un guitarra y a un violinista.
Pero al final, picó, y hasta me invitó a tabaco.
Sin embargo, la terapia está incompleta, necesitamos más sesiones, nos vendrán bien a los dos. Aunque en este caso, ninguno paga y ambos cobran; son cosas de la cuántica.