Estos rollos vienen del budismo, de Siddartha (algo refundidos luego) de quien se conocen aproximadamente sus andanzas y tonterías, muy humanas, hasta que enunció su famosa perogrullada: “en el punto medio está la virtud”. Por tanto, y para ello, también os pido un “virtuómetro” ( me da igual digital o analógico), para ponernos de acuerdo sobre la metrología de tan etérea cualidad.
Como posiblemente las religiones mitológicas se van a derrumbar estrepitosamente de aquí a poco, conviene que traigáis un poco de Amor. Deus Caritas Est, el librito que me trajisteis el año pasado ya me lo he leído, es genial, a ver si cunde… Mientras tanto, y dado que el amor se confunde mucho, traeis un poco de Filia, muy poco de Eros (de eso hoy sobra mucho, igual mejor os llevais algo) y todo lo que os quepa de Agape. A ver qué hacemos con eso, porque existe un déficit genético de locus celulares de ensamblaje, no sé si os quedará alguno por ahí, traedlo en un fago autoreplicante. Si no, se lo paso a mi hermana, que lo meterá en la máquina de replicación de la polimerasa, a ver si no se atasca, aunque lo difícil es ponerlo. Y que funcione, ya ni te cuento, manuales hay muchos, pero en otros idiomas, no los entendemos.
En fin, por este año, yo creo que ya está bien. Si lo haceis todo, prometo portarme bien y no hacerles nada a la Vieja ni al Chaval...
Un afectuoso abrazo…
No hay comentarios:
Publicar un comentario