lunes, 20 de noviembre de 2006

sin más

Comienzo este apunte sin motivo especial. Nada hace suponer que haya pasado nada, y sin embargo, en los niveles cuánticos miríadas de vibraciones energéticas se producen a cada instante. Asombra que todo eso se ponga de acuerdo para que yo, mi estructura organizativa, sea capaz de crear un fragmento de texto o percibir el entorno que me rodea e interaccionar con él.
Supongamos que, con un método de exploración adecuado, nos ponemos a examinarnos a nivel de partículas subatómicas. Veríamos un quark por aquí, a una distancia galáctica otro, a años luz otro cúmulo de materia en otro protón, del que orbitan a unos millones de unidades de medida unos electroncillos, a distancias inimaginables otra agrupación de materia.... y estaríamos unas cuantas generaciones estudiando el sistema, sin darnos cuenta de que ese sistema... ¡piensa!. Es consciente de su existencia, percibe cambios en el entorno y se adapta a ellos, induce otros cambios, en su beneficio o en beneficio...¡pasmense! de varios macrocosmos aparentemente similares... (esto es de Deepak Chopra, no lo he parido yo)
El tiempo y el espacio no son continuos, sino discretos. La materia se distribuye en forma de nodos, de red, sin que sea posible acceder a las zonas entre dichos nodos, y el tiempo tiene un intervalo de medida mínimo, tiempo de Plank que es aproximadamente 1-33 segundos. También se comporta a "saltitos". Estas cosas al menos es lo que han visto, cosas que evidentemente no hay que tomar como definitivas, no existe nada definitivo, los niveles de exploración son tan delicados que seguro que nos asombran, como la expansión acelerada del universo, a ver cómo se explica, como tantos otros interrogantes cósmicos.
Tan preocupados de lo que ocurra lejos, y tan ignorantes de lo que pasa cerca... por no decir de lo que acontece en nosotros.


No hay comentarios: