Vale, te digo de lo que hablo: de la economía, de la recuperación, del crecimiento... Bueeeee, la cosa está clara. De siempre, históricamente, teníamos unos activos, fundamentalmente mentales, que nos han permitido ser la cultura más desarrollada y próspera del mundo, en parte, es cierto, a costa de los demás.
PERO, pero, posiblemente se ha acabado. Mientras nuestro pensamiento esté centrado en nuestra conquista de nuestros derechos, nuestro bienestar absoluto, nuestras posesiones, nuestro placer y hedonismo, y pasarlo de puta madre, sin disposición a la más mínima concesión o sacrificio, no hay nada que hacer.
Como es la enésima vez que lo digo, pues me callaría, pero es que duele, de verdad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario