Desde hace años, China (como estado) ha creado una infraestructura de hackers y piratas informáticos que ya no sólo se dedican a luchar contra disidentes, intereses y demás, sino que de un tiempo a esta parte han extraido información estratégica y militar muy sensible de todos los países desarrollados, y sigue atacando descaradamente todas las fuentes que puede. El alcance del problema es, por supuesto, desconocido, pero es algo que hay que tomarse muy en serio, como una agresión en toda regla, y además de detenerla, hacerle entender que, de seguir así, tendrá consecuencias.
(Aunque lamentablemente no tenemos capacidad de represalia, algo que también tenemos que solucionar, y por el momento, no tiene pintas)
No hay comentarios:
Publicar un comentario